También conocido como la siembra de nubes, es una forma de manipular el clima al intentar cambiar el tipo de precipitación que cae de las nubes. El bombardeo de nubes consiste en inyectar yoduro de plata a las nubes con mayor cantidad de agua para que estas se condensen y produzcan precipitaciones.
La sustancia comúnmente usada es el yoduro de plata y el hielo seco, que es dióxido de carbono congelado. No obstante, también se ha usado en ocasiones el propano líquido.
¿Para qué se puede usar el bombardeo de nubes?
Previamente se ha comentado que la siembra de nubes se usa principalmente para aumentar la lluvia o nieve, pero también suelen usarla en aeropuertos para suprimir el granizo y la niebla.
En cuanto a su principal uso, este bombardeo de nubes nació en 1946 y el objetivo es poder combatir los períodos de sequía. Por esta razón es común que muchos países alrededor del mundo opten por este método para intentar manipular el clima.
¿Cómo funciona el bombardeo de nubes?
Es necesario que las nubes tengan agua líquida por debajo de los cero grados Celsius. Cuando se introduce en la nube yoduro de plata, induce a una congelación por medio de la nucleación de cristales de hielo.
El bombardeo de nubes puede hacerse desde un avión o por dispositivos de dispersión desde el suelo. Sea cual sea el método, cuando se aplica yoduro de plata se produce un efecto físico y el yoduro actúa como agente de congelamiento.
Posteriormente el agua pasa al estado sólido y se produce una liberación de calor latente. En consecuencia, se calienta la nube y aumenta su inestabilidad de precipitaciones en hasta un 20%.
Efectos del bombardeo de nubes sobre la salud y ecosistema
El yoduro de plata es dañino cuando se está expuesto a él de manera continua, pues empieza a ser tóxico a partir de las 50 partes por millón. Durante el bombardeo de nubes se usan concentraciones de máximo 0,1 partes por millón. Por lo tanto, el impacto sobre el suelo, vegetación o seres vivos es insignificante.
